Lo imprescindible
Abadía de JumiègesComo parte del Parc Naturel Régional des Boucles de la Seine Normande, visite Jumièges, una comuna ante todo conocida y renombrada por su magnífica Abadía de Saint-Pierre. Las ruinas de este majestuoso edificio son espectaculares e imperdibles. Una aplicación para tableta y móvil le permitirá admirar la abadía reconstruida en 3D y 360°.
Llamada «la ruina más bella de Francia» por Víctor Hugo, la abadía de Jumièges es una visita obligada en los bucles del Sena. Descubra sus dos inmensas torres románicas y su nave sin techo pero majestuosa. El parque alberga los vestigios de una iglesia carolingia saqueada por los vikingos, y una vivienda abacial del siglo XVII convertida en lugar de exposiciones.
Visite Jumièges para descubrir esta joya y emprenda la ruta de las abadías normandas hasta la abadía del Mont-Saint-Michel.
Pase por Jumièges para descubrir esta joya y emprenda la ruta de las abadías normandas hasta la abadía del Mont-Saint-Michel.
Visite Jumièges,
Naturaleza y ocio en el valle del SenaPasee por las orillas del Sena, para un paseo rejuvenecedor. También puede aprovechar el entorno verde de la base de loisirs du Mesnil-sous-Jumièges para un momento de convivencia con sus seres queridos, familia o amigos. Esta base de ocio ofrece numerosos servicios y actividades, sobre todo en temporada alta, como accrobranche, minigolf, pédalo, tiro con arco. Su playa equipada permite a grandes y pequeños refrescarse en verano.
A este bonito municipio llega el ferry, que facilita el desplazamiento de una orilla a otra. Visitar Jumièges también significa tomar el ferry y disfrutar de una experiencia insólita en el Sena.
La ruta de la fruta
Descubra Normandía en bicicleta en un rincón paradisíaco entre Jumièges y Duclair. Entre los bucles del Sena y huertos, pedalee por un lugar único donde el tiempo se detiene y comienza la curiosidad. A pocos minutos de Rouen y de su centro medieval, sumérjase en el corazón del bocage normando, en el corazón del departamento de Seine-Maritime.
A lo largo de 62 km, la ruta de la fruta atraviesa huertos salpicados de un patrimonio arquitectónico de gran valor histórico, como la abadía de Jumièges.
Ofrece el colorido espectáculo de manzanas, peras, ciruelas y cerezas que podrá venir a comprar directamente a la puerta. Coja su cesta, ¡esta Normandía viva y generosa no es ningún mito! La región también cuenta con numerosas marismas, auténtico depósito de biodiversidad, y ríos y lagos que harán las delicias de los amantes de la naturaleza